¿Qué es la amaxofobia?
El miedo a conducir puede parecer duro, pero muchas personas lo padecen. En este artículo te decimos qué es la amaxofobia, sus síntomas, origen y sobre todo, en caso de padecerlo, si es posible curarse.
Definición de amaxofobia
El término amaxofobia viene del griego y está compuesto por amaxo que significa carro, carruaje o coche y fobia que significa miedo o temor. Podemos definir a la amaxofobia como el miedo irracional a conducir, cuyo origen se puede dar de diferentes formas en cada persona.
Es esencial que sepas diferenciar el miedo del pánico. El miedo se activa en el cuerpo mientras el pánico se activa en la mente cuando intentas controlar lo que percibes y sientes. Es justamente en este intento de tranquilizarte cuando aumenta más el miedo y al final lo que haces es retroalimentarlo más.
¿Cuáles son los síntomas de la amaxofobia?
Las personas que padecen amaxofobia pueden sentir de forma habitual:
- Sensaciones desagradables como ansiedad y angustia.
- Síntomas físicos como sudores de manos, temblores y rigidez muscular.
- Miedos irracionales que hacen que las personas conduzcan con miedos y tensiones.
- Pensamientos distorsionados del entorno de la situación al momento de conducir.
- Lo más común es que la persona que la padece se sienta incomprendida por su entorno lo cual le genera a su vez una disminución de su propia autoconfianza, lo que supone el obstáculo principal para superar el problema.
- Afecta profundamente la seguridad y la autoestima de las personas.
- Produce nerviosismo y taquicardia.
- Dolor de estómago.
- En muchas ocasiones se presentan mareos.
- Sensación de falta de aire.
- Entumecimiento de extremidades.
- Pueden presentarse dolores musculares.
- Insomnio y pesadillas relacionadas con el solo hecho de conducir.
- Disminución y aumento del apetito.
- Las personas pueden visualizar posibles peligros.
- Sensación de alerta permanente.
Origen y causas
El miedo irracional a conducir se origina normalmente cuando la persona han tenido una experiencia traumática previa como un accidente de tráfico o algún problema durante la conducción, como un robo. Además, esta fobia puede ser a su vez síntoma de otro trastorno. Por su parte, el estrés puede afectar bastante a la persona que lo padece.
Afecta en gran medida a conductores que presentan falta de experiencia al volante, sobre todo si llevan mucho tiempo sin conducir o no han conducido casi nada desde que sacaron el carnet de conducir. No obstante, la falta de maniobra también es un desencadenante que aumenta la ansiedad. En este caso se puede solucionar tomando clases prácticas de reciclaje.
¿Se puede curar esta fobia?
Para poder superar el miedo a conducir es importante realizar un tratamiento a medida teniendo en cuenta las causas que lo desencadenaron. Si es tu caso y notas que la situación te sobrepasa, lo mejor es consultar a un psicoterapeuta. Es recomendable evitar coger el coche para no poner en peligro la seguridad vial tanto de los peatones como de los conductores hasta que te sientas totalmente seguro.
Si crees que padeces amaxofobia, al igual que el resto de fobias, debes ser consciente del problema y estar dispuesto a querer cambiar esta situación que te incapacita.
Existen varias técnicas terapéuticas para resolver la amaxofobia, desde técnicas muy sencillas de relajación y respiración profunda, así como técnicas de exposición en vivo o incluso mediante realidad virtual que simulan la situación que desencadena el pánico.
Cada vez más se están desarrollando más softwares de realidad virtual para el tratamiento de la amaxofobia. Se establecen simulaciones a esa exposición real mientras se van midiendo índices biométricos relacionados con la ansiedad y se van regulando los escenarios temidos de forma progresiva.
No olvides que el miedo a conducir debe abordarse de forma específica según cuál sea su origen.
